Barcelona descarta prohibir la entrada a la ciudad de autocares con turistas.

El Ayuntamiento de Barcelona no prevé prohibir la entrada de autobuses con turistas en la ciudad, pero tratará de minimizar las molestias a los vecinos con medidas como el aparcamiento de la plaza Hispanitat que en 2015 liberará de buses el entorno de la Basílica de la Sagrada Familia, ha afirmado este jueves el concejal de Movilidad, Francesc Narváez.


   "No contemplamos la prohibición de entrada de los autocares turísticos en Barcelona", ha asegurado el edil en la Comisión municipal de Movilidad y Seguridad, de forma que el consistorio continuará fomentando que circulen por la ciudad, ya que del turismo dependen miles de empleos.

   A diferencia de ciudades como Brujas (Bélgica), una localidad pequeña que ha blindado el centro contra los autocares, la capital catalana "tiene una dimensión que permite que entren", pero debe seguir construyendo infraestructura para estos vehículos y minimizar las molestias a los vecinos.

   El edil de ERC Ricard Martínez ha pedido medidas que reduzcan su circulación para disminuir la contaminación atmosférica y porque hay calles que están "al umbral del colapso", por lo que ha planteado crear cuatro aparcamientos disuasorios al estilo del de Hispanitat, y que después los turistas se muevan en transporte público.

   Para reducir el "agobio" de los residentes de los alrededores de la Sagrada Familia, el Ayuntamiento construirá en cuatro años un aparcamiento subterráneo con capacidad para 20 autocares en Hispanitat, al lado de la avenida Diagonal y que puede incluir coches, por lo que los turistas ya no podrán bajar del autocar ante el templo y tendrán que caminar unos 200 metros.

   El consistorio ya ha abierto el expediente para expropiar los terrenos donde se hará el aparcamiento --debe ser derruido un taller mecánico entre Aragó y Lepant--, aunque su construcción depende del soterramiento del vial procedente de la plaza de les Glòries, para lo que aún no hay acuerdo, y de cómo salvar el túnel de Renfe.

   Por ahora, se centra en medidas más inmediatas, y ha prohibido el giro de los autocares de Marina hacia Provença para evitar que se dediquen a dar vueltas a la Sagrada Familia mientras los turistas hacen fotografías a la basílica sin bajarse de él.

   Además, el Ayuntamiento vigila constantemente los autocares que dejan a los turistas ante la basílica para que no estén más tiempo estacionados de lo necesario, y esta zona se completa con un aparcamiento de duración media entre Marina y la Diagonal, y el de larga estancia de Consell de Cent y Cartagena, que acabará eliminándose porque se construirá una escuela.

SIN DENUNCIAR EN HOTELES

   En la comisión, que ha abierto la última jornada de comisiones del pleno de este mandato, la tercera teniente de alcalde y responsable de Seguridad, Assumpta Escarp, ha apostado por que los clientes de los hoteles denuncien vía Internet cuando han sido objeto de un hurto, ya que hacerlo en los propios establecimientos ha provocado que algunas denuncias no se hicieran bien.

   La también concejal de Ciutat Vella ha reconocido que han aumentado los robos en comercios en el ámbito de Santa Caterina y Sant Pere --donde recientemente ha sido asesinado un comerciante pakistaní--, y ha reclamado a los Mossos d'Esquadra que trabajen con los equipos de investigación contra las redes organizadas, pues estas generan "un problema de seguridad y de percepción".

Fuente: EUROPA PRESS