La jornada ‘Análisis del transporte interurbano de viajeros’ que organizó FENEBUS la semana pasada y a la que asistieron cerca de un centenar de profesionales del sector entre operadores y representantes de FENEBUS en las Comunidades Autónomas, comenzó con la intervención de Emilio Sidera, subdirector de Ordenación y Normativa del Ministerio de Fomento. En su opinión, la supervivencia de las empresas está directamente relacionada con el aumento del tamaño de éstas.
Sidera, que ha explicado los nuevos cambios normativos que afectarán al sector, se ha referido al Reglamento 1071 que entrará en vigor el próximo año y ha explicado que la norma pretende mejorar la oferta de transporte, profesionalizar a todos los trabajadores del sector e incluir las últimas tecnologías de la comunicación y la información en las empresas operadoras. En su opinión, “la Comisión Europea con este reglamento profundiza en la liberalización del sector, pero sin desregularlo” y protege el sistema concesional de los ataques de algunas instituciones. El responsable de Fomento señaló que el tamaño de las empresas será un factor clave para su supervivencia y que la atomización que existe en el sector deberá ir desapareciendo con alianzas y acuerdos que aseguren la competitividad.
Asimismo, Sidera recordó que la modificación de la LOTT está ya en el Congreso y que posteriormente habrá que adaptar el ROTT a los cambios introducidos en la ley, una tarea que supone que comenzará este otoño y que se llevará a cabo también con la colaboración del sector.
Javier Fuentes, director general del Grupo Esfera, centró su intervención en el Plan Plata II que prepara el Ministerio de Fomento junto con el sector para impulsar el transporte regular de uso especial y el discrecional. “El proyecto me ha creado un sentimiento agridulce”, explicó Fuentes para referirse a un plan que ha reducido su campo de actuación a la elaboración de una guía de contratación que no es vinculante. Para el responsable de Grupo Esfera, el sector afronta numerosos problemas y entre los más urgentes está la falta de interlocutores profesionales a la hora de redactar los contratos de transporte –en el caso del escolar es una tarea de Educación- y el desequilibrio entre costes de explotación y precios que se produce con los contratos no responsables.
Respecto al futuro, afirmó que “el escenario no mejorará y por tanto se producirá un empobrecimiento de las empresas y la prestación de servicios de peor calidad para el usuario”.
Francisco Iglesias, director general de la División de Transporte Interurbano de Alsa, habló sobre el entorno en que se mueve el transporte regular y señaló como principales problemas a la crisis, la rigidez del modelo regulador para adaptarse a la oferta, el próximo vencimiento de las concesiones, la falta de orden en la competencia entre modos y la contracción de la demanda.
El sector trabaja en un mercado en el que ha perdido una cuota de clientes del 10% y cuyas tarifas deberían haber subido desde 2008 un 2,8% teniendo en cuenta el IPC en lugar de rebajarse casi un 1%. Para Iglesias, la incertidumbre y la falta de un criterio firme sobre lo que significa realizar una oferta temeraria componen un escenario de futuro en el que las empresas deberían “apostar por mantener la oferta y los servicios, considerando al cliente como el fin último”.
Fuente: Gabinete de prensa de Fenebus
Sidera, que ha explicado los nuevos cambios normativos que afectarán al sector, se ha referido al Reglamento 1071 que entrará en vigor el próximo año y ha explicado que la norma pretende mejorar la oferta de transporte, profesionalizar a todos los trabajadores del sector e incluir las últimas tecnologías de la comunicación y la información en las empresas operadoras. En su opinión, “la Comisión Europea con este reglamento profundiza en la liberalización del sector, pero sin desregularlo” y protege el sistema concesional de los ataques de algunas instituciones. El responsable de Fomento señaló que el tamaño de las empresas será un factor clave para su supervivencia y que la atomización que existe en el sector deberá ir desapareciendo con alianzas y acuerdos que aseguren la competitividad.
Asimismo, Sidera recordó que la modificación de la LOTT está ya en el Congreso y que posteriormente habrá que adaptar el ROTT a los cambios introducidos en la ley, una tarea que supone que comenzará este otoño y que se llevará a cabo también con la colaboración del sector.
Javier Fuentes, director general del Grupo Esfera, centró su intervención en el Plan Plata II que prepara el Ministerio de Fomento junto con el sector para impulsar el transporte regular de uso especial y el discrecional. “El proyecto me ha creado un sentimiento agridulce”, explicó Fuentes para referirse a un plan que ha reducido su campo de actuación a la elaboración de una guía de contratación que no es vinculante. Para el responsable de Grupo Esfera, el sector afronta numerosos problemas y entre los más urgentes está la falta de interlocutores profesionales a la hora de redactar los contratos de transporte –en el caso del escolar es una tarea de Educación- y el desequilibrio entre costes de explotación y precios que se produce con los contratos no responsables.
Respecto al futuro, afirmó que “el escenario no mejorará y por tanto se producirá un empobrecimiento de las empresas y la prestación de servicios de peor calidad para el usuario”.
Francisco Iglesias, director general de la División de Transporte Interurbano de Alsa, habló sobre el entorno en que se mueve el transporte regular y señaló como principales problemas a la crisis, la rigidez del modelo regulador para adaptarse a la oferta, el próximo vencimiento de las concesiones, la falta de orden en la competencia entre modos y la contracción de la demanda.
El sector trabaja en un mercado en el que ha perdido una cuota de clientes del 10% y cuyas tarifas deberían haber subido desde 2008 un 2,8% teniendo en cuenta el IPC en lugar de rebajarse casi un 1%. Para Iglesias, la incertidumbre y la falta de un criterio firme sobre lo que significa realizar una oferta temeraria componen un escenario de futuro en el que las empresas deberían “apostar por mantener la oferta y los servicios, considerando al cliente como el fin último”.
Fuente: Gabinete de prensa de Fenebus
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