El pasado 15 de diciembre el PE aprobó su proyecto de resolución sobre el Libro Blanco de Transportes. Los eurodiputados votaron un texto que asegura que "el autobús puede contribuir a una comodalidad eficiente en el transporte urbano, suburbano y regional, si se produce la adaptación o puesta a disposición de infraestructura".
Según recoge Fenebús en su boletín semanal, entre otras muchas cosas, la resolución pide la internalización de los costes externos de todos los modos de transporte así como recoger todas las normas fundamentales relativas a los derechos de los pasajeros en una Carta de los derechos de los pasajeros que cubra todos los modos.
El grupo de los Verdes había presentado toda una serie de enmiendas dirigidas a la promoción de modos de transporte distintos de la carretera —por ejemplo, limitar las ayudas a proyectos de carreteras en un 20% del total de cofinanciación de la UE o el establecimiento de que al menos el 40% de co-financiamiento debía ser gastado en proyectos ferroviarios —. Sin embargo, todas esas enmiendas fueron rechazadas.
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