El autobús es el modo de transporte colectivo más utilizado, un actor clave para la estrategia de movilidad sostenible. Cubre el 55% de los desplazamientos (en términos de viajero/km.) que se realizan —más del doble que el avión (22,5%) o que el tren (20,5%)—, dando servicio a más de 1.100 millones de viajeros al año.
De este porcentaje, un 60% son atendidos por los servicios regulares generales sujetos al régimen de competencia regulada mediante concesión administrativa.
Una política de promoción del uso del autobús que lograra que un 10% del tráfico en vehículo privado se realizara en autobús, supondría una reducción de emisiones de cuatro millones de toneladas de CO2. El equivalente al cumplimiento del 11% del objetivo anual global para el total de sectores difusos establecido en el Plan Nacional de Asignación 2008-2012.
El uso de autobús frente a la alternativa del coche supone un ahorro de 1.330 millones de litros de combustible, un 28% del objetivo global del Plan de Acción 2005-2007 de la Estrategia de Ahorro y Eficiencia Energética (EAEE) y un 64% del objetivo fijado para el sector de transporte.
Si el 10% de los desplazamientos en vehículo privado se realizaran en autobús, se lograría un ahorro energético de 770 millones de litros de combustible, que equivale al 37% del objetivo de ahorro del conjunto del sector del transporte y al 16% del objetivo global del Plan de Acción 2005-2007 recogido en la EAEE.
El medio más eficiente
Desde Asintra consideran que en época de austeridad presupuestaria, es razonable una reorientación de las políticas de transporte hacia el autobús como el modo de transporte más eficiente en términos de uso de infraestructuras y con escaso coste para las arcas públicas.
Sin embargo, romper con el apego cultural al vehículo privado y lograr la migración hacia el transporte público requerirá de inversiones en infraestructuras dedicadas para mejorar definitivamente la calidad del servicio: carriles Bus-VAO, estaciones e intercambiadores modales de coste mucho más moderado que los que requieren los otros modos de transporte y que se amortizan a los pocos años de su puesta en servicio.
"Estos datos nos avalan como el modo más eficiente y económico para convertir al sector en una potente herramienta para alcanzar los objetivos del gobierno. Es tiempo de autobús", subrayan desde la asociación empresarial.
Fuente: NexoBus
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